Septiembre, mes de reinicios: cómo recuperar cuerpo y mente tras el verano

Con septiembre llega la vuelta a la rutina. Tras meses de vacaciones, cambios de horarios, viajes y hábitos más relajados, el organismo y la mente deben readaptarse a los ritmos diarios. Este período, aunque lleno de oportunidades para “empezar de nuevo”, también puede traer consigo cansancio, estrés y dificultades para retomar hábitos saludables.

Recuperar el sueño, primer paso hacia el bienestar

“El descanso es fundamental para afrontar la vuelta al trabajo o al colegio”, señala la nutricionista y coach de salud Laura Fernández. Durante el verano, los horarios se suelen alterar: se duerme más tarde, se descansa menos y se rompen rutinas. Para retomar el equilibrio, los expertos recomiendan establecer una hora fija para acostarse y levantarse, incluso durante los fines de semana, y limitar el uso de pantallas antes de dormir.

Dormir bien no solo ayuda a recuperar energía, sino que también influye directamente en el estado de ánimo, la concentración y la regulación del apetito, elementos fundamentales para un regreso saludable a la rutina.

Alimentación: transición hacia la normalidad

Septiembre es el momento ideal para reorganizar la dieta. “Durante el verano tendemos a comer fuera de casa, consumir más azúcares y alimentos procesados”, explica la dietista Marta López. La vuelta a los hábitos saludables puede incluir frutas y verduras de temporada, como manzanas, peras y calabaza, y priorizar alimentos frescos, ricos en fibra y proteína magra.

La hidratación también es crucial. Aunque las temperaturas comienzan a bajar, el cuerpo sigue necesitando líquidos para funcionar correctamente. Beber agua de manera constante y limitar refrescos y bebidas azucaradas ayuda a mantener la energía y favorecer la concentración.

Movimiento: retomar la actividad física sin presión

El ejercicio físico, incluso moderado, se convierte en un aliado para reducir el estrés, mejorar el sueño y fortalecer el sistema inmunitario. “No hace falta volver a la rutina deportiva de golpe. Caminar, subir escaleras o hacer sesiones de 20 minutos de ejercicios en casa puede ser suficiente para retomar el hábito y generar motivación”, aconsejan expertos en deporte.

El objetivo es incorporar la actividad física de forma progresiva, evitando lesiones y frustraciones, y disfrutar de pequeños logros que refuercen la constancia.

Estrategias para la salud mental

El regreso a la rutina también afecta la salud mental. Psicólogos coinciden en que el “síndrome postvacacional” es real y se manifiesta con irritabilidad, cansancio y ansiedad. Para mitigarlo, se recomienda:

• Planificar la semana con antelación y fijar objetivos realistas.

• Reservar momentos de ocio y desconexión, como paseos, lectura o meditación.

• Mantener contacto social y compartir experiencias con amigos o familiares.

“Combinar organización, autocuidado y actividad física es la clave para una vuelta a la rutina saludable”, aseguran.  

Pequeños cambios, grandes resultados

Septiembre puede sentirse como un reinicio del año, de hecho para mucha gente "el año comienza en septiembre", pero con la ventaja de que el verano ha recargado energías y experiencias. Adoptar hábitos saludables de forma progresiva y consciente ayuda a mejorar la salud física y mental, y convierte la rutina en un aliado, no en un enemigo.

Al final, el secreto está en escuchar al cuerpo, priorizar el descanso, cuidar la alimentación, moverse con regularidad y reservar tiempo para la mente. Así, la vuelta a la rutina puede ser no solo un regreso a la normalidad, sino una oportunidad para mejorar el bienestar integral.