La Guardia Civil detuvo hoy en Becerreá a un ciudadano portugués de 48 años como presunto autor de un delito de incendio forestal por imprudencia. El fuego se había originado el pasado 18 de septiembre en la parroquia de Vilachá y afectó a monte raso y arbolado. Requirió la intervención de medios terrestres y aéreos para su extinción. Según la investigación, el incendio se produjo por las chispas ocasionadas por la maquinaria de desbroce al golpear contra piedras en los márgenes de la carretera que conduce a Bustelo.
Los agentes identificaron en la zona a dos trabajadores de una empresa de desbroces, uno de los cuales intentó abandonar el lugar al advertir la presencia de la patrulla. Las pesquisas determinaron además que uno de ellos llevaba meses trabajando sin contrato, extremo conocido por el propietario de la empresa, que le abonaba el salario en efectivo sin justificación oficial. Por este motivo, también se investiga al responsable de la empresa como supuesto autor de un delito contra los derechos de los trabajadores. Las diligencias han sido remitidas a la autoridad judicial.